¿Qué es una Caliza?

 

La caliza es una roca sedimentaria* compuesta mayoritariamente por carbonato de calcio. También puede contener pequeñas cantidades de minerales como arcilla, hematita, siderita, cuarzo, etc., que modifican el color y el grado de coherencia de la roca.

El carácter prácticamente monomineral de las calizas permite reconocerlas fácilmente gracias a dos características físicas y químicas fundamentales de la calcita: es menos dura que el cobre y reacciona con efervescencia en presencia de ácidos tales como el ácido clorhídrico.

* Las rocas sedimentarias son rocas que se forman por acumulación de sedimentos, los cuales son partículas de diversos tamaños que son transportadas por el agua, el hielo o el viento, y son sometidas a procesos físicos y químicos (diagénesis), que dan lugar a materiales consolidados.

Diferencia entre Caliza y Mármol:

Caliza

Mármol

El mármol es una roca metamórfica compacta que se generó a partir de una serie de procesos geológicos (temperatura y presión) sobre rocas calizas. Es decir, antes que mármol fue una roca caliza. Las rocas calizas pueden tener un origen biológico o químico (este último menos común). En ambos casos se trata de rocas sedimentarias. El origen biológico se produce por depósito de fósiles mientras que el químico se origina por precipitación del carbonato cálcico.

Como hemos indicado, los mármoles proceden del metamorfismo de las rocas calizas por recristalización, originándose un aumento de la compacidad y variando el resto de las características físicas respecto a la roca de origen. La estructura cristalina de ambas rocas es distinta pese a contar con el mismo componente mayoritario

La diferencia entre roca caliza y mármol estriba en su estructura cristalina y obtendremos más prestaciones de durabilidad en un mármol que en un roca caliza.

No podremos encontrar tampoco en un mármol restos de fósiles, presentes en las calizas, y visibles mediante ensayos de lámina delgada o microscopía

 

Terminaciones

Pulido

Con el pulido se consigue una superficie suave, lisa y brillante, con porosidad casi nula, destacando al máximo nivel la estructura, color y textura de la piedra. Este acabado al ser de «poro cerrado», proporciona a la piedra mayor resistencia al ataque de agentes externos, resistencia que se puede aumentar con diversos tratamientos de protección.

Cabe resaltar que el poro de la piedra nunca llega a estar cerrado, con el pulido se trata de minimizarlo al máximo. El pulido se consigue mediante abrasión,  pasando por diferentes granulometrí­as cada vez mas finas, que dan a la piedra ese aspecto de «brillante». En la actualidad se utiliza principalmente el abrasivo diamantado.

Usos recomendados: En pavimentos, está destinado exclusivamente a su uso en interiores, por su mayor grado de deslizamiento. Revestimientos verticales interiores y exteriores. Encimeras.

Apomazado

El apomazado se logra mediante un proceso de abrasión similar al del pulido, pero sin llegar a conseguir brillo (liso y mate). Se consiguen superficies planas, lisas, mates y sin ninguna marca visible ni rugosidades, el tono proporcionado es más oscuro que con otras terminaciones excepto la del pulido, lo que resalta mucho la estructura, textura y colores de la piedra.

Se suele aplicar a piedras que no admiten pulido por no llegar al grado de cristalización necesaria, caso de muchas calizas y areniscas.

Usos recomendados: Pavimentos y revestimientos de interior. Placas para fachadas en exteriores.

Arenado

El arenado de piedra natural es un acabado que se puede aplicar a todas las piedras; El arenado se realiza mediante la proyección de arena o corindón por medio de aire a presión.

Tras el proceso de arenado la superficie tratada presenta (en una visión microscópica) una serie de orificios con profundidades regulares y perfectamente uniforme. Normalmente la distancia entre orificios es variable y está determinaa por la presión del aire de la tobera, boquilla utilizada y la granulometría de la arena o abrasivo proyectado.